POESÍA MATEMÁTICA...
O LA MATEMÁTICA ES UNA POESÍA...
Hoy...algo distinto..para distendernos un poco...
Sino, leamos la siguiente declaración matemáticamente amorosa:
DECLARACIÓN MATEMÁTICA
Niña, me postro a tus pies
para pintar la pasión
como dos y una son tres.
Escucha mi amor vehemente,
pues des que te he conocido
continuamente ha crecido
en progresión ascendente.
Que me quieras solicito
y ésta no mires esquiva:
si es mi beldad negativa
mi cariño es infinito.
Multiplicamini, etcetra,
dijo Dios al padre Adán,
y yo quiero ese refrán
seguir al pie de la letra.
Mas no fundo mi porfía
en una incógnita unión
que es regla de aligación
o de falsa compañía.
No a fe, y en buen testimonio
del fin que mi amor barrunta
quiero la regla conjunta
que se llama matrimonio.
Si no sumo grandes bienes
tengo un caudal de razones;
piensa que no hay proporciones
cual la que en tu mano tienes.
Y si bien no da la ciencia
para pavos ni perdices,
ni tengo bienes raíces
ni he de elevarme a potencia.
Sabré, aunque el mundo lo note
prestar a interés compuesto,
y solamente con esto
multiplicaré tu dote.
Espero respuesta el martes.
Madrid, tantos... sin errata.
Tuyo,
Pascasio.
Postdata:
Si me desprecias me partes.
Por copia
M. Ossorio y Bernard
M. Ossorio y Bernard
Hermosa.....no??
Les dejo unas cuantas más...para disfrutar!!
Y espero sus comentarios, y por que no, alguna prosa escrita por uds!!!
Saludos!!
La Profe
PD: Esto es un homenaje a mi queridísima amiga y mentora, Profesora Irene Zapico.
Siempre en mi corazón IRE!!
Una Genia...
ResponderEliminarhttp://mathworld.wolfram.com/images/eps-gif/HeartCurves_801.gif
Espero tenerla como profesora en Discreta.
Saludos.-
Jonatan Menin
OJALÁ JONATAN!!!
ResponderEliminarTE ESPERO EN ABRIL DEL 2013!!
BESOS
LA PROFE
¡Oh severas matemáticas! No os he olvidado desde que vuestras sabias lecciones, más dulces que la miel, penetraron en mi corazón, como una oleada refrigerante; aspiraba yo instintivamente desde la cuna a beber en vuestra fuente, más antigua que el sol, y sigo aún pisando el atrio sagrado de vuestro templo solemne, como el más fiel de vuestros iniciados. Había vaguedad en mi espíritu, un no sé qué espeso como humo; pero supe subir religiosamente las gradas que conducen a vuestro altar, y habéis disipado ese velo oscuro, como el viento disipa las humaredas. Colocasteis en su lugar una frialdad excesiva, una prudencia consumada y una lógica implacable. Por medio de vuestra leche fortaleciente, mi inteligencia se ha desarrollado rápidamente, tomando proporciones inmensas en medio de esa claridad arrebatadora que dais como presente, con prodigalidad, a los que os aman con un amor sincero. ¡Aritmética!, ¡Álgebra!, ¡Geometría!, ¡Trinidad grandiosa!, ¡Luminoso triángulo! ¡El que no os ha conocido es un insensato! Merecía sufrir los mayores suplicios porque hay algo de desprecio ciego en su ignorante despreocupación; pero el que os conoce y aprecia no desea ya los bienes terrenales; se contenta con vuestros goces mágicos, y transportado sobre vuestras alas sombrías, no desea ya más que elevarse en un vuelo ligero, construyendo una hélice ascendiente hacia la bóveda esférica de los cielos.
ResponderEliminar(...)
Conde de Lautréamont
Gracias por tan hermoso aporte ALA_STRANGE!!!!
ResponderEliminarBesos y excelente finde!!
Tere